Aunque están distantes, hay diez fiscalías del
país que tienen un elemento en común: la principal denuncia que han
recibido en los primeros siete meses del 2018 ha sido por robo
calificado o agravado.
En conjunto, esas diez dependencias del ministerio público han
recibido 4,912 denuncias de infracciones por ese acto ilícito, de
21,137 de esa naturaleza, registradas en 33 fiscalías.
Ese comportamiento se registra en las fiscalías ubicadas en las
provincias Espaillat, Hato Mayor, Hermanas Mirabal, La Altagracia, La
Vega, La Romana, San Cristóbal, San José de Ocoa, Sánchez Ramírez y
Valverde.
Las denuncias por ese delito ocupan el segundo lugar entre las 49
infracciones reportadas en 33 fiscalías del país, donde, según informe
de la Procuraduría General de la República, fueron presentadas un total
de 139,701 denuncias de delitos durante el período comprendido entre
enero y julio del 2018. Pero el robo simple está en la posición 25,
con un total de 245, representando solo el 0.18 por ciento de la
totalidad de infracciones denunciadas.
El robo es la sustracción con fraude de una cosa que no le pertenece,
pero cuando el hurto se comete en ciertas circunstancias se le
denomina calificado o agravado, por lo cual aumenta la pena.
El Código Penal dominicano señala cinco circunstancias que convierten
el robo en calificado o agravado, entre ellas cuando ha sido cometido
de noche; por dos o más personas; llevando armas visibles u ocultas; con
rompimiento de paredes o techo, o con escalamiento o fractura de
puertas o ventanas, viviendas, aposentos y otros lugares habitados, y
cuando ha sido cometido con violencia o amenaza de hacer uso de armas de
fuego. El robo es sancionado con la pena de 5 a 20 años de prisión,
pero se reserva el máximo de la pena cuando es calificado o agravado.
Robos por provincias.
En Espaillat, la denuncia más común fue robo calificado, con 296, siguiéndole amenazas con 170; porte y tenencia de armas con 102; golpes y heridas con 70; tráfico de droga, 47, y asociación de malhechores, 43. La Fiscalía de allí recibió 1,046 querellas.
En Espaillat, la denuncia más común fue robo calificado, con 296, siguiéndole amenazas con 170; porte y tenencia de armas con 102; golpes y heridas con 70; tráfico de droga, 47, y asociación de malhechores, 43. La Fiscalía de allí recibió 1,046 querellas.
El robo calificado también es lo que más prevalece en Hato Mayor,
habiendo recibido la fiscalía de esa demarcación 100 denuncias de esa
infracción, seguida de asociación de malhechores, con 94; de violencia
intrafamiliar con 78, y de violencia contra la mujer con 55. La
totalidad de reporte de infracciones en esa jurisdicción suman 675.
Similar comportamiento tiene la provincia Hermanas Mirabal, donde
también las denuncias de robo calificado son más frecuentes en
comparación con otros delitos, llegando a 233, seguido de amenazas con
199; golpes y heridas con 65, y abuso de confianza con 33. Alli se
registraron 712 infracciones.
Asimismo, en La Altagracia las infracciones que más se reportan son
robo calificado con 996; seguido de traficante de droga con 581;
amenazas, 529; asociación de malhechores con 385, y golpes y heridas,
384. En la Altagracia se reportaron 4,667 denuncias de infracciones.
La fiscalía de La Vega también registra como delito más común el robo
calificado, con 1,618 de 4,486 denuncias registradas en el período
reportado por la PGR en su informe. Luego continúa las de amenazas, con
702; violencia intrafamiliar con 304; golpes y heridas con 206;
Violencia contra la mujer con 174, y asociación de malhechores, con 145.
En La Romana, en el mapa de las denuncias sobre actos delictivos
también se sitúa en primer lugar, el robo calificado, con 591,
representando ese delito el 23.24 por ciento de los 2,543 registrados en
siete meses de este año. A ese delito le sucede el tráfico de drogas
con 372; asociación de malhechores con 329; distribución de droga con
229, y amenazas con 194.
En San Cristóbal, el robo calificado también constituye el delito más
denunciado ante la fiscalía de esa jurisdicción, con un total de 369,
equivalente al 20.27 por ciento de las 1,820 infracciones recibidas.
Al ordenar por cantidad de denuncias, el segundo lugar corresponde a
las de violencia contra la mujer, con 230; asociación de malhechores
con 224; violencia intrafamiliar con 208; porte y tenencia de armas con
106.
La fiscalía de San José de Ocoa también recibe más casos por robo
calificado, con un total de 86, el 34.54 por ciento de las 246 denuncias
reportadas en 7 meses del 2018. Los otros delitos más frecuentes allí
son asociación de malhechores y violencia contra la mujer e
intrafamiliar.
AMENAZAS Y OTROS DELITOS
Mientras, las infracciones más reportadas en la fiscalía Duarte (San Francisco de Macorís) son por amenazas, con 154 de las 389 que recibió esa dependencia del ministerio público en los primeros siete meses del 2018, correspondiente al 42.16 por ciento.
En esa jurisdicción, el segundo lugar en función de la cantidad de
querellas por delitos penales lo ocupan los golpes y heridas con 62
casos; robo calificado con 54; abuso de confianza con 21, y estafa con
14. Lo mismo ocurre en Monseñor Nouel (Bonao), que la mayor cantidad de
denuncias fue por amenazas, con 426, seguido de robo calificado con 257;
violencia intrafamiliar con 114; abuso de confianza con 97, y golpes y
heridas con 94.